La Iglesia Ortodoxa Rusa condena la erótica exposición de Picasso ‘Suite 347‎’ en Novosibirsk
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En la exposición denominada “Tentación” están representados ciento cinco de los trescientos cuarenta y siete aguafuertes creados por el pintor en 1968.

Al reunirse la semana pasada con el alcalde de Novosibirsk, Vladímir Gorodetskí, el Metropolita de Novosibirsk y Berdsk, Tijon, criticó severamente la exposición que, según él, no se exhibió ni siquiera en Moscú. Es más, a juicio del prelado, “la exposición está prohibida en todo el mundo y solamente la organizan y muestran en nuestra ciudad”. El Metropolita llamó la atención de la gran cantidad de menores de edad que asisten a la exhibición.

El ciclo de grabados de Pablo Picasso “Suite 347” se exhibe íntegramente en siete colecciones de acceso libre para el público, esto es: el Museo Picasso de Barcelona (España), la Biblioteca Nacional de Francia, el Museo Picasso de París (Francia), el Instituto de Arte de Chicago (EE.UU.), el Museo Ludwig de Colonia (Alemania), el Museo de Jerusalén (Israel) y la Fundación Gottfried Keller (Suiza).

Del 12 de noviembre al 5 de febrero la exposición “Pablo Picasso. Tentación” permaneció abierta en la ciudad siberiana de Krasnoyarsk sin que los representantes de la Iglesia Ortodoxa Rusa hubieran encontrado motivos para expresar su indignación a la administración municipal.

A fines de abril, los polémicos grabados se mostrarán en el Museo de Arte de la provincia de Tomsk. Y en contraste con la actitud negativa demostrada por los jerarcas de Novosibirsk, los sacerdotes de Tomsk se muestran más tolerantes.

"Se trata de la vida cultural de la ciudad con la que la Iglesia no tiene nada que ver, – señala Víctor Sirotin, secretario de la Heptarquía de Tomsk. – No podemos prohibir a la gente frecuentar los clubes nocturnos. Cada cual toma por cuenta propia la decisión de asistir o no a las actividades de esa índole y esta decisión depende de su moral y su espiritualidad”.

Las obras de este ciclo son, en efecto, bastante provocadores, pero no lo son más que ciertas pinturas de la Grecia o la India antiguas. El maestro hizo los trescientos cuarenta y siete grabados y litografías en siete meses, desde el 16 de marzo hasta el 5 de octubre de 1968. La serie consta de varias secciones: escenas de amor de Rafael y su amada Fornarina espiándoles Miguel Ángel y el Papa Julio II; reelaboraciones de conocidos lienzos de Rembrandt, Manet, Degás, Velázquez y Delacroix y motivos del tema “El pintor y la modelo”, entre otros.

Natalia Yaroslávtseva, ministra de cultura de la provincia de Novosibirsk, remitió una carta oficial a los representantes de la Iglesia Ortodoxa Rusa señalando que “la cultura mundial debe estar presente en la política de difusión de los museos de esta provincia y los ciudadanos cultos e instruidos elegirán por su cuenta las exposiciones que han de visitar”.

La ministra se remitió asimismo a la resolución del Gobierno de Rusia № 609 del 26 de junio de 1995 que dice que las instituciones públicas “no se inmiscuirán en la actividad profesional y creativa de las entidades culturales siempre que dicha actividad «no haga propaganda de la guerra, la violencia y la crueldad, de la exclusividad o intolerancia racial, nacional, religiosa, clasista u otra, ni de la pornografía”. La exposición expuesta en el Museo Etnográfico de Novosibirsk “no puede ser incluida en ningún de estos criterios”, subraya la ministra.

La Voz de Rusia


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