Máxima autoridad religiosa de Arabia Saudí propuso destruir las iglesias cristianas en la Península Arábiga
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Los pronunciamientos intolerantes del líder de los musulmanes de la Península Arábiga dejaron atónita a la comunidad cristiana internacional y sorprendieron a los seguidores de la doctrina del Profeta.

Según distintas fuentes, las declaraciones de la autoridad espiritual musulmana fueron emitidas en respuesta a una pregunta de la Sociedad de renacimiento de la cultura islámica. Esta organización no gubernamental kuwaití está empeñada en la promulgación de una ley que prohíba levantar nuevas iglesias cristianas en su país. Activistas de la Sociedad solicitaron consejo a su líder religioso, el jeque Abdul Aziz bin Abdullah quien tiene autoridad incontestable en el reino musulmán suní. Remitiéndose a una regla antigua que supuestamente reza que solamente el Islam puede y debe ser profesado en esa región, el líder espiritual propuso a las autoridades de los países integrados en el Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo Pérsico no sólo dejar de construir nuevos templos cristianos, sino demoler los existentes.

La declaración  del jeque sembró desconcierto incluso entre los seguidores del Islam. “Seguramente las palabras del muftí fueron mal interpretadas”- manifestó a La Voz de Rusia Albir Krgánov, vicepresidente primero de la Dirección Espiritual Central de Musulmanes de Rusia:

− En los tiempos del profeta Mahoma existían diferentes creencias religiosas y templos de distintas confesiones. Incluso personas de diferentes confesiones acudían en busca del profeta. El Corán enseña que el hombre tiene derecho a profesar no sólo la religión musulmana y hasta ser irreligioso. Por eso no acabo de entender del todo las palabras del respetado muftí. Hoy todo intento de construir un Estado monoreligioso está condenado al fracaso. Hay templos cristianos en distintos Estados musulmanes, como también hay mezquitas en las ciudades europeas. El mundo actual es muy multifacético. Y lo más importante es que representantes de diferentes confesiones se respeten, que no haya lenguaje hostil ni llamados a emprender acciones radicales.

La esperanza de que las palabras de Abdul Aziz bin Abdullah hayan sido mal interpretadas sería más real si los cristianos residentes en Oriente Medio no fuesen víctimas de la persecución en los últimos tiempos. A comienzos de febrero varias decenas de cristianos etíopes fueron detenidos en Arabia Saudí y serán expulsados del país por haber tomado parte en la misa de Navidad celebrada clandestinamente en la ciudad de Jeddah. Según las leyes del reino, solamente los musulmanes tienen derecho a oficiar ceremonias religiosas públicas. A fines de 2011 en Jordania se difundió el precepto emitido por el jeque Abu Humam al-Athari, miembro del Consejo del Shari´a, que inequívocamente permitía capturar las mujeres de los “infieles” y tener relaciones sexuales con ellas. 

En los Emiratos Árabes Unidos viven actualmente cerca de ochenta mil cristianos y se cuenta con al menos una decena de iglesias de diferentes confesiones. Entre ellas está el tempo de la Iglesia ortodoxa rusa erigido a fines de 2011, después de haberse recibido la autorización de las autoridades del reino. El Patriarcado de Moscú está preocupado por la suerte de los creyentes rusos y de sus hermanos en la fe. «Confiamos mucho en que el llamado del jeque no sea oído ni apoyado» - manifestó a La Voz de Rusia el arzobispo Mark de Egorievsk quien encabeza la Dirección de centros extranjeros de la Iglesia Ortodoxa Rusa:

− En Rusia siempre hemos vivido en paz con los hermanos musulmanes y se nos dice que el Islam es la religión de la paz. Personalmente, conozco a muchos musulmanes y los respeto como creyentes y líderes religiosos. Los pronunciamientos del muftí saudí se contradicen con lo que sabemos del Islam. Espero que hayan sido emitidas bajo el influjo de las emociones. Pero las emociones no son el mejor consejero del ser humano quien debe guiarse por la razón.

En la dirección espiritual del reino no se confirma la existencia del precepto que ordena destruir las iglesias. Pero hasta rumores sobre una declaración tan categórica del líder espiritual de la Península Arábiga podrán provocar una oleada de vandalismo injustificado respecto a las iglesias en este país árabe e incluso una cadena de maltratos y vejaciones de heterodoxos en todo Oriente Medio. No olvidemos que en los últimos años muchos seguidores de la doctrina de Cristo se vieron arrastrados por el éxodo de esa área. Solamente el año pasado un 75 % de los cristianos abandonó Libia. El número de cristianos en Túnez disminuye vertiginosamente y en Egipto no pasa del 10 %. Es parecida la situación en Sudán, Eritrea y Somalia donde los adeptos al cristianismo totalizan menos del uno por ciento.

La Voz de Rusia


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