“Es importante que la Epifanía no se convierta en una fiesta folclórica, cuando se sumergen en aguas para no sólo percibir la gracia de Dios sino que según un rito. Qué cada uno quien se sumerja hoy en aguas gélidas, recuerde que el agua es bendita… que debe ser persona diferente al bañarse”, dijo el Patriarca al oficiar la liturgia en la Catedral de Epifanía de Elojovo de Moscú.
El máximo jerarca de la Iglesia Ortodoxa de Rusia destacó que las características milagrosas del agua no es “fuerza de la magia ni de hechicería” sino que “la fuerza divina que actúa sólo cuando se usa con fe y veneración”.
Este jueves, 19 de enero, La Iglesia Ortodoxa de Rusia celebra el día de la Epifanía, una de las 12 fiestas ortodoxas más importantes.
Este día numerosos ortodoxos rusos acuden a las iglesias para participar en la liturgia y la ceremonia de la bendición del agua que se celebra después para luego llevar botellas con agua bendita a sus hogares. Algunos siguen la tradición de bañarse en aguas gélidas de ríos y estanques la noche del 18 al 19 de enero.
RIA Novosti